Bodegas Cepa 21
Cata virtual con José Moro para celebrar el Día Europeo del Enoturismo en Bodegas Cepa 21
Con motivo del Día Europeo del Enoturismo, Bodegas Cepa 21 organiza un fin de semana de puertas abiertas los próximos 7 y 8 de noviembre en el que los visitantes tendrán la oportunidad de degustar los vinos de Cepa 21 en una cata dirigida por el Presidente de la Bodega, José Moro. La propuesta incluirá un Photocall para los visitantes y ofrecerá la oportunidad de conocer la nueva imagen de sus vinos.
Bodegas Cepa 21 aprovecha esta ocasión para la presentación ante el público de las nuevas añadas de Hito, Cepa 21 y Malabrigo, a través de una reproducción audiovisual. Esta nueva imagen supone un cambio en el formato de botella y etiquetado.
Bodegas Cepa 21. La Bodega Ribereña ofrece tres horarios para facilitar las visitas, 11:30 horas, 13:00 horas y 17:30 horas. Durante el 7 y el 8 de noviembre, los asistentes conocerán de forma gratuita las instalaciones de Cepa 21 Bodegas a través de una visita libre por los viñedos, zona de elaboración y embotellado, parque de barricas y sala de cata, donde se llevará a cabo una degustación de sus vinos acompañados de las magníficas vistas que rodean la bodega. Una propuesta perfecta para compartir el fin de semana con familia y amigos.
Enmarcado en el Día Europeo del Enoturismo, esta iniciativa pretende acercar la cultura del vino, así como promover y difundir su oferta vinícola, gastronómica y patrimonial.
Información y reservas: 983 48 40 83 y [email protected]

Sobre Bodegas Cepa 21
Bodegas Cepa 21 fue inaugurada en 2007 con el firme objetivo de elaborar vinos de altísima calidad cuidando al detalles todos los elementos que intervienen el la vinificación, desde la selección del terruño y la uva hasta un control pormenorizado de los procesos en viñedo y en bodega. El edificio de Bodegas Cepa 21 es elegante, sobrio, está perfectamente integrado con el paisaje y está equipado con la más moderna tecnología. Por su situación, la bodega domina un paisaje de cincuenta hectáreas de viñedo propio plantadas con cepas centenarias de la variedad Tinto Fino, una de las más puras del clon Tempranillo. Suelos propios de Ribera del Duero, altitudes y pendientes y una filosofía de trabajo que no utiliza ningún tipo de producto residual en la plantación, dan como resultado vinos con toda la tipicidad de Ribera, eso sí, pasada por el crisol de la revolución vitivinícola de los últimos años.