Los vinos olorosos son bebidas elaboradas a base de la uva Palomino, su nombre de debe a que como consecuencia de proceso cuentan con un potente aroma y sabor. Esta variedad de vino se obtiene con un proceso similar al de la mayoría. Aunque producto de ciertas variaciones cuentan con un alto contenido alcohólico.
Es una bebida oriunda de Montilla-Moriles y del Marco de Jerez, donde con un procedimiento minucioso se seleccionan qué mostos serán utilizados. Zona prestigiosa por los tipos de vinos que elaboran y sus variedades de uvas. Sin embargo para comprender apropiadamente qué es un vino oloroso y qué les caracteriza es necesario ahondar en sus características.
Las principales características de los vinos olorosos
Al escuchar por primera vez de los vinos olorosos es fácil preguntarse qué los diferencia de otros tipos de vinos, lo cual es fácilmente apreciable incluso antes de consumirse. Como consecuencia del tratamiento del Palomino y el uso de hongos de levadura el vino tiene un color oro oscuro.
Tras apreciar su color la siguiente impresión que se recibe es la de su potente aroma que refleja su complejidad, que refleja las frutas con detalles a caramelo. En cuanto a su sabor se caracteriza por ser seco, poco dulce, ya que solo cuenta con 5gr/litros de azúcar o menos. Cuenta con un buen cuerpo y una acidez total controlada de 4–6gr/litros en ácido tartárico.
Otro elemento que destaca en este tipo de vinos es su alto contenido alcohólico, que puede variar entre 17° y 25°, lo que marca una diferencia notoria entre otras bebidas de este tipo. Además, por su potente sabor se recomienda beberlo suavemente, en pequeños sorbos para apreciarlo adecuadamente.

¿Cómo se elaboran los vinos olorosos?
Se inicia el proceso con la recolección de la uva, luego se seleccionan las mismas, se limpian y se separan para proceder a la elaboración del mosto. El Palomino produce una gran concentración de alcohol, por lo que los mostos se separan según su grado de alcohol, donde a juicio del enólogo se utilizarán para los distintos vinos de Jerez.
Luego el mosto es seleccionado nuevamente pero según su sabor y aroma, escogiendo así los más apropiados para cada categoría. Después se añade alcohol vínico con el objetivo de matar microorganismos que pudieran perjudicar el vino. Para finalizar el proceso se deja en barricas de roble americano, donde cogerá parte de sus propiedades características.
Otros tipos de vinos Jerez
Además de los populares vinos olorosos, en la región de Jerez se producen otros vinos característicos de la región. Algunos de ellos salen como producto de los mostos que no se han utilizado para la elaboración de los olorosos, como es el caso del Amontillado o del Fino, variedades muy cotizadas de la región. Del mismo modo en esta DO se encuentra el Dulce de Jerez, el Palo Cortado, la Manzanilla y la Crema de Jerez.